A todas esas almas perdidas que se olvidaron de creer en la inmensidad del amor

miércoles, 18 de agosto de 2010

Detrás de la desconfianza está la vida, detrás de la mentira, el miedo a la verdad. Aunque asuste la idea de perderte, es más grande la vergüenza de no dejarte volar. Y caen los días y las verdades en picada, son los anuncios en las arrugas de la piel. Cuanto más quiero aferrarme a la vida más la empiezo a perder. Y confío aunque no es lo conveniente, hoy en día todo el mundo está armado hasta los dientes; el amor se hizo un juego inteligente que se usa de disfraz para engañar a la gente.