A todas esas almas perdidas que se olvidaron de creer en la inmensidad del amor

domingo, 30 de enero de 2011

mi locura es sólo mia -y tuya-

Una de las tres Marías sigue brillando, se está apagando pero sigue brillando. Afuera el planeta rojo para-parpadeando. Mi vieja estrella está dormida... Mi vida, qué tranquilo estás, me enamorás cada día mucho más, cada día más profundamente: infinitamente te estoy queriendo. Mi estrella, mía, está durmiendo. Una de las tres Marías sigue brillando, se está apagando pero sigue brillando afuera... Soñá con los angelitos, soñá conmigo... con todo el tiempo que nos queda juntos. Mi vida, qué tranquilo estás. Me enamorás cada día mucho más, cada día más profundamente: infinitamente te estoy queriendo. (En el cielo las tres Marías siguen brillando, una está apagada pero sigue brillando). Por eso es que es una estrella, porque sigue brillando después de tiempo...

No hay comentarios:

Publicar un comentario